EL PASEANTE
Fuente: urbinavinos.blogspot.com |
Paseaba lentamente junto al mar. Contemplaba a lo lejos el Puerto Viejo de Algorta mientras su mente organizaba las tareas del día siguiente.
Casi sin querer se fijó en unos gorriones que jugaban a perseguirse mientras se disputaban los restos de un bocadillo que había en el suelo.
Se sentó en un banco a contemplarles y descubrió que eran felices en sus pequeños juegos. Que no se preocupaban por cómo sería su vida cuando fueran viejos y tuvieran achaques, cuando los hijos se fueran y algunos amigos partieran también. Entendió que la vida está hecha de pequeños momentos como aquel y que esos eran los verdaderos tesoros, que cada uno tiene su destino en el Teatro de la Vida, pero siempre puede variar el rumbo.
Se levantó con nuevas energías y decidió que cuando se sintiera triste o desanimado solo tenía que acercarse a la Naturaleza y dejar de pensar.
*Recuerda: "Piensa menos, siente más"